
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ordenó este miércoles la expulsión inmediata de toda la delegación diplomática de Israel en el país, en respuesta a la detención de dos ciudadanas colombianas —Manuela Bedoya y Luna Barreto— por parte de fuerzas israelíes mientras participaban en la Flotilla Global Sumud rumbo a Gaza.
“Sale toda la delegación diplomática de Israel en Colombia”, afirmó el mandatario en un mensaje oficial, calificando el hecho como un “nuevo crimen internacional”. Petro también anunció la denuncia formal del tratado de libre comercio con Israel, con el objetivo de dejarlo sin efecto.
La decisión agrava la ya deteriorada relación bilateral. En mayo de 2024, Colombia había roto relaciones diplomáticas con Israel, aunque mantenía servicios consulares mínimos. Con esta medida, el Gobierno busca ejercer mayor presión en medio de la crisis humanitaria en Gaza y reafirma su postura de respaldo a Palestina.
La oposición, encabezada por el Centro Democrático, criticó con dureza la decisión y advirtió que afectará los intereses diplomáticos y comerciales del país. Por su parte, organizaciones como Hamas calificaron la medida como un gesto de solidaridad simbólica hacia el pueblo palestino.
La expulsión de la misión diplomática israelí marca un nuevo capítulo en la política exterior de Colombia bajo Petro, quien ha endurecido su discurso frente a Israel y reclama mayor acción internacional contra lo que califica como crímenes de guerra en Gaza.
BNN África || El País / La República / Infobae