Expertos internacionales en seguridad alimentaria advirtieron que Sudán del Sur continúa sufriendo una crisis severa de alimentación y nutrición, la cual podría empeorar si no se brinda ayuda humanitaria de manera urgente.
Según un nuevo informe publicado el martes por la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria (IPC), más de la mitad de la población del país —alrededor de 7,56 millones de personas— enfrentará hambre severa en 2026. Además, más de dos millones de niños se verán afectados por desnutrición aguda.
Los especialistas mostraron particular preocupación por la situación de unas 28.000 personas en los condados nororientales de Nasir y Fangak, que padecen lo que se describe como “inseguridad alimentaria catastrófica”, el nivel más extremo de hambre.
“Esta es una trayectoria alarmante”, declaró Mary-Ellen McGroarty, directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en Sudán del Sur. “Los niveles persistentemente altos de hambre son profundamente preocupantes”.
El informe subraya que la violencia es la principal causa del hambre en el país, junto con otros factores como la crisis económica y los choques climáticos. Los enfrentamientos entre fuerzas gubernamentales y rebeldes han representado un obstáculo significativo para la entrega de ayuda humanitaria.
La ONU advirtió la semana pasada que Sudán del Sur corre el riesgo de volver a un conflicto a gran escala si la situación no mejora.
Fuente: Integrated Food Security Phase Classification (IPC)
